Septiembre se va con todo su picante, con la fiesta, el ruido y el desorden que siempre deja su huella, pero octubre ya empieza a sentirse distinto: el aire cambia, las calles se llenan de colores más cálidos y, sobre todo, empieza a oler a pan de muerto. Ese primer bocado dulce, suave y esponjoso que nadie se quiere perder, porque hay placeres que simplemente se esperan todo el año para disfrutarse sin culpa, como con Prudence.
Prudence
Y aquí viene lo bueno: así como hay quienes comparten su pan de muerto con todos y quienes prefieren guardarlo solo para ellos, los lubricantes también tienen esa dualidad. Pueden ser el mejor cómplice en pareja o el aliado perfecto en esos momentos donde prefieres disfrutar contigo. Al final, el placer no debería sentirse como algo prohibido, sino como ese antojo secreto que disfrutas sin remordimientos, en el momento exacto en que lo deseas.
Existen lubricantes a base agua como los de prudence que respetan lo natural del cuerpo: son ligeros, fáciles de limpiar, compatibles con condones y, sobre todo, hechos para sumar. Porque no quitan nada, al contrario: suman suavidad, suman placer, suman intensidad y también suman libertad. Te permiten explorar, jugar y experimentar sin complicaciones, con esa ligereza que hace que todo se sienta más auténtico y delicioso.
El placer no es un lujo de temporada, pero qué mejor que aprovechar este mes para recordarlo. Octubre siempre nos invita a lo dulce y lo travieso, a probar lo que deseamos, a jugar con lo nuevo y a descubrir que lo natural también puede ser lo más rico.
Así como esperamos con ansias ese primer pan de muerto para saborearlo despacito, también podemos darnos permiso de disfrutar de nosotros mismos y también de nuestra pareja.
Porque si algo nos deja claro este cambio de mes es que hay placeres que nunca pasan de moda. Y cuando se trata del placer, resbalar es tan sabroso, tan inevitable y tan irresistible como ese primer mordisco al pan de muerto.
Melómano por naturaleza y comunicólogo de profesión. Amo el vino tinto, el mezcal y escribir sobre autos, cine, música, gastronomía, tecnología y todo lo relacionado con estilo de vida.
Soñaba con ser rockstar, pero la vida me llevo por otro camino y aquí me tienen, plasmando con letras varias historias.

