Pocos artistas conocen el significado de la frase un país que no tiene memoria como Ai Weiwei, quien pone los ojos en uno de los acontecimientos más dolorosos que ha sucedido en México en los últimos años: la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
El ojo crítico de Ai Weiwei
El nuevo documental de Ai Weiwei denominado Vivos (2019), se proyectará este jueves 7 de mayo a las 00:00 hrs. en www.ambulante.org como parte del festival en línea Ambulante en Casa, y estará disponible por 24 horas.
El documental de Ai Weiwei es una nueva mirada sobre la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos la noche del 26 de septiembre de 2014.
Estos hechos se dieron bajo condiciones muy sospechosas que siguen sin aclararse debido a la impunidad de las autoridades en el sexenio anterior por tergiversar la investigación.
No obstante se creó una Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa en diciembre de 2018, sin embargo, siguen sin aclarecerse los hechos.
Vivos, un documental emotivo
Este filme cuenta desde la intimidad lo que significa vivir la ausencia de un familiar desaparecido, a través de las historias de algunos de los familiares de los 43 estudiantes.
En México la desaparición de personas es pan de cada día. Hasta el 31 de diciembre de 2019, la cifra de desaparecidos superó las 60 mil personas, de acuerdo con la Secretaría de Gobernación.
“En esta película hay un verdadero deseo de estar juntos y de mostrar que la desaparición forzada no solo atañe a algunas personas que viven con un familiar desaparecido, sino que es un tema que nos concierne a todos”, agregó Carlos Rossini, fotógrafo de la película.
No es la primera vez que Ai Weiwei se involucra en la tragedia de Ayotzinapa. En abril de 2019 inauguró en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC) su muestra Reestablecer memorias.
En la exposición exploró las heridas sociales, políticas y culturales derivadas de las experiencias vividas en China y en México, en un relato que apelaba a la obligación ciudadana de construir una memoria social para impedir el olvido.
Melómano por naturaleza y comunicólogo de profesión. Amo el vino tinto, el mezcal y escribir sobre autos, cine, música, gastronomía, tecnología y todo lo relacionado con estilo de vida.
Soñaba con ser rockstar, pero la vida me llevo por otro camino y aquí me tienen, plasmando con letras varias historias.