Este 13 de febrero se estrena la segunda temporada de “Castle Rock”, una serie creada a partir de los personajes y relatos del gran maestro del terror, Stephen King. Sí o sí, debes verla, es un acto imperdible.
Castle Rock; la demencia de Annie Wilkes
Se los decimos con grata franqueza, no hay por el momento una serie de terror que tenga tantos aciertos y esté mejor estructura que “Castle Rock”.
Y no, no es por deshacernos en halagos efímeros, es porque realmente esta serie tiene una atmósfera fascinante.
No es una precuela ni secuela de alguna obra del maestro Stephen King. Son referencias de algunos de sus personajes más significativos, para esta nueva temporada está el caso de la demente Annie Wilkes (Misery), interpretada por Lizzy Caplan, quien muestra un semblante pálido, esbelto y con ojos de una locura completa.
El mundo del terror
Pero antes de entrar de lleno a la narrativa y sesgar la segunda temporada, metámonos un poco en contexto. Castle Rock no es una serie escrita por Stephen King, toma como base el universo literario del escritor estadounidense, como escenarios e incluso el nombre de la serie, el cual se refiere a un pueblo ficticio de Maine en el que se han ubicado poco más de una docena de cuentos o novelas de King, entre ellas Zona muerta (1979), La niebla (1980), Cujo (1981), El cuerpo (1982) y La mitad oscura (1989), entre otras más.
El aderezo. Los productores
Si bien la pluma de King no intervino de forma directa para la serie, sí lo hizo su mente, el apoyo, el dinero y claro, el visto bueno, ya que funge como productor ejecutivo junto a nada más y nada menos que, J.J. Abrams, sí, el hombre que estuvo detrás de productos como Lost y la última saga de Star Wars, así que… ¡Imagínense el suculento platillo de esta sinergia!
Castle Rock segunda temporada
Para esta segunda temporada como mencionamos unos párrafos arriba, el personaje principal es Annie Wilkes, a quien durante los primeros minutos vemos en su etapa como adolescente corriendo toda ensangrentada por un bosque sin rumbo fijo.
Lo que veremos después de esta pequeña escena, que se explicará con el paso de los capítulos, es a Annie huyendo con su hija; se le ve despavorida, con ojeras y con una mirada perdida, dando a notar que la locura invade completamente su cabeza.
Wilkes y su hija huyen en todo momento, van de pueblo en pueblo hasta llegar a Castle Rock, lugar donde pretenden establecerse con nombres y personalidades ficticias, sin embargo, el desorden mental de Annie les traerá problemas muy pronto.
Su inestabilidad no solo le causa conflictos con las personas de su entorno, con quien desde un principio no logra relacionarse, sino también con su mente, ya que comienza a tener alucinaciones y ansiedad, y esto se debe porque no consume sus medicamentos.
Hasta la locura
A Annie se le nota en todo momento desesperada; quiere mantener el control de las situaciones, pero no lo consigue, por el contrario, la atmósfera entre locutor e interlocutor se ve tensa, misteriosa, sin empatía.
La serie avanza en cada capítulo a pasos agigantados, el ritmo es preciso y eso se nota cuando, casi de manera inmediata, descubren el extraño comportamiento de la protagonista. Se le ve perturbada por su pasado, por los desajustes químicos de su cerebro y por las ideas del sistema rígido con el que creció.
En sus ojos vemos trauma y miedo; casi siempre derrama lágrimas, pero en el fondo de todos estos sentimientos no gratos, se esconde una persona de gran agilidad mental, que ha aprendido a leer a sus oponentes para manipularlos, sobre todo cuando siente que ella o su hija están en peligro.
Un escenario terrorífico
La segunda temporada de Castle Rock corre de manera vertiginosa. Desde el primer capítulo te plantea la forma en que se va a desarrollar la serie. La música es sutil, la fotografía es nostálgica y se juega con varios matices, por ejemplo hay tonos grises y azules para crear una ansiedad en el espectador.
Las actuaciones de todo el reparto son buenas, no hay exageración, por el contrario, todo se torna tan natural y eso hace que cada capítulo te adentre más a la trama.
En Castle Rock encontrarás en terror fino, que no acude a recursos innecesarios como la elevación de música y cambios repentinos de la cámara para exaltarte y brincar de tu asiento y que casi casi te de un infarto; en pocas palabras, no es predecible, se maneja (y es obvio) al terror implantado por King en sus obras, algo más psicológico.
Eso sí, y pon atención en las siguientes líneas, casi al final del primer episodio, hay una escena que te deja con la boca abierta, no vas a parpadear, tal vez te lleves la mano a la boca como en signo de incredulidad y, probablemente, pronuncies la palabra fuck debido a la violencia explicita.
¿Dónde verla?
A través de la plataforma Starzplay, un sistema de distribución de contenidos en línea al cual puedes acceder en México por medio de diferentes mecanismos.
Estreno 13 de febrero.
https://youtube.com/watch?v=LwJYtjJdWWQ
Melómano por naturaleza y comunicólogo de profesión. Amo el vino tinto, el mezcal y escribir sobre autos, cine, música, gastronomía, tecnología y todo lo relacionado con estilo de vida.
Soñaba con ser rockstar, pero la vida me llevo por otro camino y aquí me tienen, plasmando con letras varias historias.